Casona donde se decía que existía la imagen de una virgen a quién le crecía el pelo y si la traslaban a otro lugar "ella se regresaba a su casa"
El terreno corresponde a lo que era propiedad de Don Julio Delgado, y medía desde lo que hoy se conoce como calle El Cortijo con Avenida Brasil y Miraflores, hasta el otro lado de Américo Vespucio, que no existía; y que a la altura donde está instalada ahora una sucursal de Sorepa tenía una lechería.